“Vibración Sensible”
Las escenas de Antonio Chaurand tiemblan en un sentido real, como si el momento en el que existieron fuera demasiado fugaz para captarlo. Aunque sus imágenes provienen de fotografías, quizás no es la escena misma lo más importante o significativo, sino la composición y la manera de aplicar la pintura. En ambientes cotidianos, en habitaciones solitarias o reuniones, surge al mismo tiempo una idea de una atmósfera de misterio, o de una penumbra en movimiento, dónde todos los personajes son en realidad anónimos. Las figuras se disipan en una especie de siluetas o seres gaseosos. La luz se exagera para lograr las entonaciones adecuadas y los claroscuros más dramáticos. El formato apaisado te acerca a una visión de la pantalla, de un ojo que quiere percibir más, o de una secuencia que no se detiene. Las pinturas de Antonio Chaurand son imágenes dónde la inmediatez del tiempo se vuelve una vibración sensible.
“Pistas para Errar” Sofía Echeverri